miércoles, 9 de julio de 2008

¡QUÉ MIEDO SABER TANTO!



VEO... VEO...

La vida se ha acelerado y nosotros, o vamos a su ritmo, o nos caemos. Antes la política se fraguaba en los mentideros políticos y algunas veces, como ahora, en el Parlamento; actualmente la política ya no se hace en mentideros políticos, sencillamente porque no existen a no ser que estén inscritos en las pantallas, cada vez más, de plasma; ni en el Parlamento, porque si no está igualmente delimitado por el marco de nuestra pantalla casera, tampoco existe.

La pantalla de la tele tiene la ventaja para unos, y el inconveniente para otros, de que siempre te pilla en pijama y muchas veces durmiendo. Ha llovido mucho desde que Kennedy inventó el flequillo para los que duermen o dormitan, o dormimos o dormitamos, con la boca entreabierta y colgándonos la baba.

El caso es que todos hemos ido avanzando en la misma dirección, y lo que para los sesudos políticos decimonónicos –caso de levantar la cabeza- sería incomprensible, para un nutrido grupo de los de a pie, del XXI, ya empieza a sonarnos repetitivo: repetitivo machacón, si quien lo dice es repetitivo y machacón. La suerte para los que abusan de las pantuflas ajenas, es que todavía queda un gran grupo, que ni se entera.

Todo esto viene a cuento porque anoche (08/07/08) me tragué una entrevista que le hacían a don Zapatero dos periodistas y un periodisto (montera en mano, se lo brindo a la Aído). Lo que le dijeron los de Moncloa-City –que lo es- que tenía que repetir, el que juega a presidente, como el eco lejano de la fuente, sonaba presente: tocaba decir “crisis” y, ¡toma!, lo dijo; y alargarse en los asuntos poco espinosos... dejaría a sus asesores, cual a Ortega Cano en bodorrio; la lección de aire en la economía... vamos, pa’ La Latina... y por si fuera poco, y como mandan los cánones en estos eventos el/la periodisto/a-colchón (-“Anda, guapo, échate un ratito encima, que vayan girando las saetas y evitaremos saetas.”). Pues eso, para ese papel, ¿quién mejor que la Otero, doña Julia Otero, empeñada en hacerle una y las veces que hiciese falta la misma pregunta asaz sagaz?: “Presi, y su hermoso dedo, ¿qué?

Pues eso: ¡QUÉ MIEDO SABER TANTO! (Que francamente, no sé si es mucho, pero casi tanto como ellos... creo que sí).

4 comentarios:

A. Sánchez dijo...

Esto es el periodismo domesticado, amigo muyseño...en el que Julia Otero es una experta.

En España los periodistas no distinguen entre información y opinión, la mayoría de ellos no dejan de ser meros propagandistas del gobierno de turno.

Acuérdate de las entrevistas que hizo Gabilondo a ZP y a Marianico, todo eran jabonamientos, enjuagues y complicidades hacia uno y ataques y asperezas hacia el otro.

Esto pasa en los medios de uno y otro bando, por lo que los llamo 'medios de propagación' en lugar de medios de información:
http://rnn-asp.blogspot.com/2008/03/sistemas-de-propagacin.html

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Peasso memoria, Ángel... peasso memoria. (Por la entrada de tu blog).

Es vedad que lamentablemente existe -casi no exixte otro- ese tipo de periodismos doméstico, pero tambien es cierto que, de tanto verlo, los ciudadanos cada vez lo detectamos más, por lo que cada vez, espero que les resulte más difícil seguir engañándonos.

A. Sánchez dijo...

Tanto les da si les resulta difícil o no engañarnos.

La pseudopolítica sigue y la partitocracia los encumbra y endiosa, así que, se desprenden del hábito de la orden de 'mendicantes del voto' y se olvidan del rebaño hasta las siguientes elecciones, momento en el que vuelven a desempolvar el sayo... y así hasta el infinito y más allááá...

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

No sé, Ángel, estoy intentando contestarte y, cuando llevo un rato escribiendo, leo y tengo que borrar, porque me parece muy ingenuo lo que digo. Veo aspectos que me hacer ser optimista, pero, precisamente borro lo que escribo, porque no acabo de creérmelo.